Del salario mínimo y otros menesteres sociales
Dicen los ugeteros que hay ciento cincuenta mil aragoneses que cobran menos de mil euros al mes, lo cual es patético. Pero más patético es que la solución que plantean es que en la negociación colectiva que van a comenzar el próximo año, ningún convenio quede por debajo de esta cifra. Y es que, precisamente, el sábado hablaba con Álex que ha venido a pasar unos días de su orgasmus en París que en el Estado vecino el salario mínimo se encuentra en mil doscientos machacantes.
Es más que muy lamentable que aquí, en esta piel de toro tersa y dura quienes se han autoproclamado como salvadores de la clase obrera sin que nadie se lo haya pedido, se planteen que se llegue a los mil euros al mes a través de la negociación colectiva con los empresarios y no se esté planteando que sea el propio Estado, gobernado por los mismos colores que el sindicato vertical oficial que ha hecho la propuesta, el que eleve el salario mínimo, que actualmente no llega a los seiscientos machacantes, es decir, cien mil de las antiguas pesetillas.
Claro que así se cumplen dos objetivos: desviar el interés de la sociedad y señalar a los empresarios (que cumplen su papel en la sociedad) y no al Estado (que no lo cumple) como responsables de que sean ciento cincuenta mil los aragoneses que cobran menos de mil euros al mes, a la vez que publicitar a su sindicato como la salvaguarda de nuestros convenios colectivos, pero podríamos empezar a enumerar las veces que el sindicato vertical oficial ha claudicado en su lucha obrera.
La verdad es que no estamos para monas en este país en el que la promoción del empleo se hace a través de contratos precarios subvencionados por el Gobierno del mismo color que el sindicato vertical oficial y amarillo. En fin, que siempre habrá quienes hablen por todos nosotros buscando sus propios intereses. El sindicalismo, como la política, también está podrido.
5 comentarios
Diego -
elBetoCo! -
Molotov -
Y ahora todos a Torrellas a fumar porros y follar. Que lo paga el sindi...
Albertico -
Y ya no hablar de las prácticas, que eso sí es otra vergüenza.
Hablaré de esto también en mi blog: inzivilizado.wordpress.com
Diego -