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Rincón Olvidado

De bajones y otras hierbas

De bajones y otras hierbas

Pues no. No me alegro del bajón de la Chunta. Pese a todo no me alegro porque ha significado -es verdad lo que dicen los mainates de la CHA- un aumento del bipartidismo. Pero es que el aumento de la abstención ha estado relacionado con el del bipartidismo. Y me explico: mi análisis pasa porque mucha gran parte del electorado de CHA se ha quedado en casa sin votar. Y eso ha hecho que el pastel fuese más grande para los otros partidos. Es decir, que el aumento del llamado bipartidismo ha sido debido a un aumento de la abstención que ha perjudicado, principalmente, a Chunta.

Algunas actitudes que hemos visto hoy en los blogs no son positivas. La reacción correcta ante unos resultados electorales como éstos, en los que el apoyo de CHA se ha reducido a algo menos de la mitad, es la que ha tenido Chesús Yuste -aunque me pese reconocérselo-, la de pensar que algo se ha hecho mal. Sin embargo, ha habido militantes de CHA que en sus blogs, directamente, han señalado al electorado como responsable de que Chunta no haya recibido el voto. Afirmaciones como esa no hacen sino perjudicar al partido, ya que, en primer lugar, faltan al respeto de los votantes y a su nivel intelectual y, en segundo lugar, minan las posibilidades del partido de volver a crecer. El partido y sus dirigentes son responsables, en última instancia, de su bajón electoral. Los electores son libres de votar a quienes crean que mejor pueden gobernar una tierra y merecen todo el respeto del mundo.

Analizar el por qué del bajón electoral es un terreno difícil de pisar. Yo apuesto porque últimamente la Chunta se había institucionalizado demasiado y había perdido la calle, entre otras cosas, por su complicada situación interna. Un partido minoritario nunca debe dejar de tener presencia en todos los ambientes posibles para no perder su implantación. Lo de Chunta es la prueba del siete de que institucionalizar un partido minoritario y olvidar la calle es su tumba política. Esquerra jamás se llegó a institucionalizar del todo cuando asumió poder en Catalunya. Sus juventudes seguían trabajando en la calle, en los movimientos sociales, organizaban sus conciertos, transmitían ideas y utopías a la juventud. Sus militantes se oponían al Estatut abiertamente y cuestionaban diariamente el pacto con el PSC. En Aragón, la Chunta defenestró a todos los críticos y perdió presencia en la calle. Y, con la calle, perdió las urnas. Es mi humilde, pero lógica opinión.

Sigo pensando que lo que la sociedad quería de Chunta era un partido borinero y radicalmente diferente, con unas juventudes valientes y utópicas, con una militancia activa y comprometida y ser, realmente, quien reflejase las necesidades e ilusiones de la ciudadanía en las instituciones. Últimamente eran los pocos militantes que quedaban los que transmitían a la calle las opiniones cerradas de los gobernantes. Y lo han pagado caro. Y a mi, me pesa muchísimo.

Pero en fin, que quedan cuatro años por delante. Mi humilde opinión es que Chunta debe volver a la oposición y retirarse a sus cuarteles de invierno, regenerarse, volver a nacer y presentarse en 2011, con cuatro años por delante, de nuevo, con los errores aprendidos y las ideas tan claras como en 2003. Si el PSOE le ofrece la DGA, acabará por fagocitar su trozo del pastel del todo. Y entonces, todos lloraremos.

1 comentario

Alber -

Yo es que no entiendo mucho de política, así que comentaré lo que me salga del pirulí, porque, aunque no sea un culto político (digo culto en política), llevo días con incontinencia verbal: no digas "mi humilde opinión", porque, si estimamos las opiniones tanto como para darlas no son humildes, porque cada uno valemos mogollón. He dicho.
Alber