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Rincón Olvidado

Con Iván, por la educación

Con Iván, por la educación

Asistimos día a día a un penoso espectáculo en nuestros institutos, vemos como cada día se llenan de niños y jóvenes vacíos, de gente que no le preocupa su futuro y de gente anulada por el propio sistema. Y no es que haga responsable de esto a los propios jóvenes, sino a un sistema educativo que sólo se ha preocupado en transmitir conocimientos -y de aquellas maneras- y también a quienes han olvidado que su nómina les llega a cambio de educar a los chavales en todos los sentidos.

Y en este panorama, aparece Iván, que detecta en primera persona algunos errores del sistema educativo y, consciente de ello, los denuncia públicamente en su blog. Y el insituto, junto con un profesor, le denuncian. No voy a poner el acento de mi comentario en el tema de la libertad de expresión, ya que, además de que eso ya lo han hecho otros, porque es el argumento fácil. Yo me voy más allá, a lo educativo.

¿Pueden llamarse educadores quienes coartan la libertad de expresión de un chaval? ¿Quienes le denuncian por dar su opinión, por intentar mejorar algunas cosas, por ser libre y actuar libre? Hace ya unos días que leí la noticia por primera vez, antes de hacerme eco aquí, y entendí que sus padres decían algo así como "no sabemos qué hacer con él". Ante esta frase hay que criticar el papel de la prensa, ya que da a entender que quien intenta cambiar las cosas está obrando mal y, en segundo lugar, hay que enviar un mensaje claro y contundente a sus padres: la actitud de su hijo, en este sentido, no es, para nada, reprochable.

Esta semana, Iván se ha enfrentado a un juicio, que imagino surrealista, en el que el fiscal no había visto ningún indicio de delito. Gracioso al menos que los profesores denuncien al chaval para que les dé la razón después de criticarles y al final vayan a darle la razón al chaval sin que éste lo pretenda... ¡Adelante, Iván! Te los vas a comer con patatas.

1 comentario

jessy -

ola! realmente me encanta ver que entre esos muchos jóvenes vacíos de nuestros institutos ,todavía quedan algunos con ganas de moverse y con ganas de denunciar las injusticias sociales, la pena es que este chaval no cuente con un mayor respaldo dentro de su grupo de iguales.Seguramante habrá otros tantos que esten de acuerdo con el y que desearía hacer algo , pero su miedo a las represalias o a salirse del camino marcado por la sociedad como normal.
Siendo optimistas pensemos que en todos los lugares existe un Iván ,en los trabajos, en la política , en la sociedad en general ,... dispuestos a dar 1 revolcón a las conciencias sociales de aquellos que actuan de una manera injusta sin tener en cuenta a los demas